Un argentino en el Gran Buenos Aires

Friday, August 05, 2005

Mi llegada a San Francisco

Viernes 5 de Agosto de 2005

Después de un viaje de 16 horas de avión /(Buenos Aires-Atlanta. Atlanta-San Francisco) llegué a los Estados Unidos. Por primera vez en mis 29 años de edad piso suelo yanki (no norteamericano porque en el 2002 ya habia estado en Canada). Con 40 y pico grados de fiebre (y digo pico para no decir 50, que era lo que realmente sentía) recojo mis valijas- Juro que nunca en mi vida me había sentido tan débil. Era como si realmente estuviese en un sueño muy pesado donde las reacciones no responden a los impulsos-.
Sin conocer a nadie, ni saber todavía donde iba a parar me tomé un colectivo. Opté por retar a mi suerte y no preguntar nada. Casi sin poder ver ni pensar fui absorviendo mis sensaciones de este nuevo territorio. Una de esas fue empezar a acostumbrarme a ver mexicanos por doquier.
Llegando a San Francisco empecé a prepararme para mi bajada. Siguiendo con mi estrategia de suerte decidí esperar hasta encontrar un lugar transitado. De manera que decidí bajar una vez en el Down Town. Realmente sin fuerzas me di cuenta que el lugar donde parar no tendría que exigirme una larga caminata (a mi y a mis compañeras maletas). Fue así que me metí en el primer hotel que encontré. Pocilga...?...Si. Hablé un minuto con el encargado, que por suerte hablaba español (mi estado físico decidió no permitirme recordar ni una sola palabra en otro idioma), y decidí irme. Obviamente que fui educado con el hombre y me escusé con averiguar en otros lugares antes de tomar mi decisión. Salí del lugar e hice cinco (sí, cinco) pasos y decidí que la pocilga era el lugar más apropiado, teniendo en cuenta que mi fiebre seguía subiendo y no me quedaban más fuerzas para caminar. Asi que entré tratando de disimular mi indecisión y convencido le argumenté al conserje que su establecimiento era la mejor opción para mi persona. Dos días en cama fueron los que pasé en esa posada de desagradable aroma y color. Mi primera impresión de San Francisco?...Paredes humedas con ruidosos inquilinos.